REFLEXIONES SOBRE ACCIDENTES EN LOS NIÑOS (buscando las causas para prevenir accidentes)

                                                                                         
Dr. Alberto Grieco[i]
Los accidentes aparentemente se presentan como un:

  1: suceso brusco, que ocurre de repente.
                
  2: carácter imprevisible, azaroso, nada lo hacía prever.

  3: carece de sentido: podría no haber ocurrido.

1: El carácter brusco del accidente es solo brusco en apariencia, en realidad viene gestándose desde un tiempo atrás. Ese tiempo de gestación puede ser mayor o menor, pero lo tiene. Siempre hay pequeños indicios que pre- anuncian el accidente.

2: Aceptando que existe un período de gestación ya no podemos afirmar que tiene un carácter imprevisible o azaroso.

3: Siempre vamos a encontrar un sentido si no aislamos al accidente del contexto de la vida del sujeto que lo padece.

Siempre existe un sentido.                                   

El accidente por sí solo es poco lo que nos dice, si los únicos datos que poseemos son los del accidente.

Es por ello que vamos a comprender que existen personas que tienden a accidentarse más que otras.

Podríamos decir que el accidente expresa algo que el sujeto no ha podido expresar ni ha podido decir previamente.

Se observa que los accidentes ocurren por lo general frente a situaciones de cambio, esto quiere decir que un niño no se accidenta en cualquier momento, siempre se accidenta porque está atravesando una situación especial como es una situación de cambio.

Esto no quiere decir que toda situación de cambio provoque accidentes, pero sí que ante un cambio las posibilidades aumentan.

¿Por qué un cambio potencialmente puede provocar un accidente?  Porque al niño el cambio le provoca una modificación en su estructura psíquica y si no está preparado para atravesarla o si el entorno no lo acompaña en esa elaboración, la predisposición es mayor.
Por ejemplo, un cambio puede ser solamente un cambio de etapas en la evolución del niño, por ejemplo pasar del gateo al caminar, otro cambio puede ser un cambio de lugar, una mudanza o unas vacaciones, la entrada al jardín o  la escuela, otros cambios pueden ser la repercusión de una  enfermedad de un familiar o el fallecimiento de un ser querido, etc.

Todos tenemos una manera de enfrentar los cambios, que tiene que ver siempre con una forma o un perfil que se ha ido formando desde pequeños.

En esta  formación tiene que ver mucho la familia en cómo han ido dando modelos de sostenimiento para atravesar situaciones de cambio.

Podríamos decir que de acuerdo a como a uno le han enseñado a atravesar situaciones de cambio en los primeros años de la infancia es como uno va a organizar su perfil frente a situaciones posteriores.

Por ejemplo, cuando un niño comienza a caminar se pasa de los brazos de la mamá a moverse mas independientemente en el mundo que lo  rodea, y pasa de andar gateando a andar erecto implicando un cambio en la posición postural.

Se desestructura el cuerpo que estaba preparado para gatear  y se estructura la posición erecta, esto implica -como todo cambio- un cierto temor por perder algo conocido, el gateo, y empezar a incorporar lo nuevo, la marcha como temor a lo desconocido.
Estos son los dos temores básicos frente a las situaciones de cambio que enfrenta todo ser humano, el temor a la pérdida de lo conocido y el temor a lo nuevo que se nos presenta, que siempre debemos tener en cuenta, y que se denominan por ello miedos universales porque siempre nos van a acompañar, desde la cuna hasta la muerte.

Entonces, de cómo los adultos elaboramos estos miedos en el momento que corresponda y de cómo ayudemos a nuestros hijos a resolver estos miedos que van a estar presentes en todas las situaciones de cambio, se podrá obtener una mayor o menor seguridad interna.
No es el único factor pero sí éste es un factor importantísimo.

Entonces, si tomamos conciencia de esto y estamos atentos ante situaciones de cambio y no nos inundamos de ansiedad, nosotros los adultos, seguramente que estaremos en mejor forma para ayudar a nuestros hijos dándoles un modelo de cómo atravesarlos.

No siempre son grandes cambios los que generan situaciones de ansiedad que llevan al desequilibrio y a la inseguridad. A veces son la suma de pequeños cambios, tal vez un cambio de maestra pueda alterar a un niño sobre todo si esa maestra ha sido especial en cuanto a su continencia y el momento en que se halla transitando el niño.

Si hablamos de prevención de accidentes partamos de que hay que estar prevenidos frente a los cambios y que es conveniente afrontar las situaciones de cambio pudiendo pensar en las repercusiones que pueden tener y por sobre todas las cosas ponerles palabras, hablar de las angustias, hablar de los miedos, preparando así al niño para el cambio.
                                


[i] Graduado en la UBA como médico, año 1965.  Neonatólogo y Pediatra. Médico de Hospitales. Miembro Vitalicio de la S.A.P. (Sociedad Argentina de Pediatría). Fellow of the American Academy of Pediatrics, desde Octubre de 1972. Docente de Pediatría de la U. B. A (Universidad de Buenos Aires). Jefe de Servicio de Pediatría. Docente Foro permanente de adopciones de la Asociación de Psicólogos de Bs. As. (2000-2013). Docente en el Post- grado “Parto y Nacimiento”. Facultad de Psicología de la U.B.A. Docente del “Postrado interdisciplinario en materia de adopciones". Consejo Nacional del Menor y la Familia. Ministerio de Salud y Acción Social de la Nación (1995). Gerente Técnico de la Dirección de Maternidad e Infancia de la Nación (2003). Auditor para el Área Materno Infanto-Juvenil de la Auditoría General de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (1999-2007). Profesor Fundalam (Fundación para la Lactancia Materna) (2009-2012). Docente. Cátedra de Medicina Familiar (UBA) 2013. Actualmente Presidente del CODEI (Comité de Docencia e Investigación del Partido de Tigre, Provincia de Bs. As. (2009-2013). Integrante como neonatólogo de distintos Grupos Perinatales de atención privada.  Numerosas publicaciones, entre ellas:
“Parir y Nacer en el Hospital”, Ediciones Nueva Visión Bs. As. 1993 (en colaboración)
“Los bebés y sus padres en situaciones difíciles” Editorial Rocaviva, Montevideo, R del Uruguay. 1996 (en colaboración).
“Análisis Institucional y Auditoría de Gestión”, Publicado Revista de la Academia de Medicina. “Medicina y Sociedad” Volumen 25, N°2. Noviembre 2005.
Diferentes publicaciones sobre temas de adopción.